Descritura

Padre mío, Dionisio que habitas en mi cuerpo libado sea tu nombre, Venga a nosotros tu reino, paraíso de locura ritual Vengan a mi tus fiestas dionisiacas, frenesí de abundantes orgías Hágase tu voluntad sobre mí y mis amantes Sierva de Baco soy llévame a Similia lugar de inmorales reuniones, y de maquiavelicas conspiraciones Déjame vivir las bacanales Déjame ser parte de tu séquito Dame hoy el vino de todos los días líquido de vital placer, conductor de desenfreno Siempre déjame caer en la tentación Y traeme el extasis Amén

Cansada de huir, también de sufrir, en el lento vivir, eterno morir Sentimientos inexplicables me dominan, me abruman, me hostigan, y no los puedo entender Locas ideas cruzan mi mente, como avispas que atacan, como flechas en batalla Palidez enfermiza me delata: ¿por qué el observador mundo ha de notar mi desbalance? Y entonces me desarmo, como muñeca de trapo, usada y olvidada, asqueada y debilitada ¿Por qué ni yo puedo controlar mi sentir?  Tic, tac quiero morir Tic, tac al eterno dormir Tic, tac cansada de mí Tic tac, decidí huir

Yo confieso ante ti todopoderoso lector y antes ustedes hermanos poetas que: pensé haber domado a la indomable bestia Pensé vivir plenamente en total dominio de mí Creí ser dueña absoluta de suficientes palabras, de subyugadas esclavas, bajo mi desesperado control Creí que la escritura sería mi todo: mi arma, mi salvación y mi expiación Por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa... Deseé poder sublimar mis más oscuros deseos Deseé que la catarsis de la pluma fuera suficiente Por mi deseo, por mi orgullo, por mi gran engaño... Por eso ruego a quien sea que me escuche Piedad por mi atormentada alma Piedad por mi torturada mente Piedad por mi desolado cuerpo Y que interceda por mí, porque yo ya cedí, ya me rendí, ya me perdí...   Amén

Florezco cuando me inunda el placer Bella, satisfecha y fresca me preparo, para volver a florecer Vienes como un colibrí, atraído por mi química Buscas que mis semillas germinen complacidas Con tu tacto cimbran, mis sensibles estambres Y mis pétalos se abren, sonrojados, hinchados Y bebes de mi polen, esencial néctar divino, adictiva ambrosía Luminosas inflorescencias de traviesas flores, coquetas deseantes, pasionales criaturas Danzantes juguetonas que con coloridas maniobras atrapan ingenuos polinizadores